Algunas veces llega a pasar por nuestra mente que la vida es injusta ya que mueren personas que, según juicios u opiniones, deberían tener más oportunidad de vivir que otras.
Categoría: Literatura (página 3)
El secreto
No comprendía por qué de repente mi padre nos prohibió, a mis dos hermanos mayores y a mí, entrar a ese cuarto. Hasta que un día me decidí a seguirlo.
En el último minuto
Mauricio Roldán, alias el Chimigón, de 25 años de edad, caminaba con un contoneo apresurado, casi como el de un marchista profesional, esto en el tianguis de la colonia El Arenal. Traía puesto una sudadera con la capucha sobre su cabeza, unos lentes oscuros y el cubrebocas…
Sin cuerpo presente
Ya tiene tiempo que no veo a ninguno de mis vecinos, no sé nada de mi amigo Juan que vivía en el apartamento número 20, ni de mi vecina Alicia.
Pedro, el choro
Pedro, siempre se adornaba en sus pláticas y relatos, dándoselas de erudito, manejando a la perfección, según él, cualquier tema, inventaba historias donde él era especialista en resolver problemas y brindar consejos a quien más los necesitaba.
14 de febrero
Empezamos a brindar por un año más de vida, pero no faltó quien lo hiciera por el amor y la amistad, pues ya era 14 de febrero.
El gran cabrón
Había fuertes rumores de que el viejo anda bien ensillado con un revolver 38 a la cintura, se dice que no le tiembla la mano para jalar el gatillo.
Taxi driver
Como buen operador de taxi, aprendí las reglas básicas para trabajar y una de las más importantes es que no puedes levantar pasaje fuera del municipio.
El susto
Aún recuerdo que éramos unos chiquillos juguetones, todos andábamos entre los 7 y los 12 años de edad. Nos caracterizaba las rodillas raspadas, las ropas sucias y los rostros sudados con mugre, porque prácticamente nos la pasábamos todo el día jugando.
Tres razones
No me gusta hablar de las personas que tengo que matar, sin embargo, en esta ocasión sí lo haré: Jesús Bernal.